El pasado 1 de julio, la conocida aplicación WhatsApp lanzaba una nueva e importante actualización para Android a 2.10.750. Desde entonces, los usuarios no han dejado de comentar en Google Play los problemas que da esta última versión, recordemos, de una aplicación que ya exige un pago anual.
Podemos leer en los comentarios de Google Play los muchos y diferentes problemas que muchos usuarios están teniendo con la última versión de WhatsApp. Estos van desde la necesidad de reiniciar el terminal ya que el servicio se queda bloqueado, no reconoce la agenda de contactos, fallos con los mensajes cuando se envían a través de WiFi, no es posible acceder a los archivos enviados y así un largo etcétera que se extiende durante los diez días que lleva disponible esta versión.
De momento no hay respuesta oficial por parte de los desarrolladores ante estas quejas y la única solución aparentemente disponible es la versión 2.10.766 de la beta pública que acaban de colgar hoy mismo en la propia página de WhatsApp. En teoría, esta es una versión previa de la iteración final que solucionará estos problemas y funciona con terminales con Android 2.1 Eclair o superiores. Viendo las últimas cifras de la segmentación de Android, es casi la totalidad ya que sólo un 1,5% del total de smartphones con el sistema operativo de Google están en esa versión o anteriores.
A través del enlace de descarga de la web obtenemos un archivo APK que habrá que instalarlo manualmente en el terminal, bien sea desde el propio navegador en Android o desde el archivo descargado en el ordenador. Antes de nada hay que señalar que esta versión no es una de las consideradas «finales», por lo que puede que resuelva los problemas actuales pero ofrezca alguna que otra incidencia no esperada ya que, en definitiva, es un software en desarrollo.
En primer lugar hay que ir al menú «Ajustes > Aplicaciones» y asegurarse de que está marcada la casilla en “Fuentes Desconocidas”. Ahora es cuando vamos al enlace http://www.whatsapp.com/android/ y nos descargamos el archivo APK desde el botón Download.
Ahora habrá que encontrar el archivo que nos hemos descargado con algún explorador de archivos, por ejemplo, Solid Explorer. Ya sólo nos queda localizar la carpeta de las descargas y el archivo whatsapp.apk, ejecutarlo y seguir las indicaciones para completar la instalación.
Otra opción es, desde el mismo enlace pero en el navegador del ordenador, enviarnos el archivo a nuestro propio correo Gmail. Al recibirlo en el smartphone, sólo habrá que pulsar sobre el archivo adjunto y se ejecutará la instalación.
Finalmente, la tercera vía será transferir el archivo APK a la memoria del móvil desde el ordenador mediante la opción que da Android para que el terminal actúe como medio de almacenamiento masivo o a través de los gestores de archivos de los diferentes fabricantes. Una vez alojado el archivo en el terminal, sólo hay que ejecutarlo mediante un explorador de archivos para instalarlo.