Los creadores de WhatsApp son poco dados a aparecer en los medios, es por eso que la entrevista que han concedido a El País es no sólo importante, sino muy interesante por declaraciones como «somos los sucesores del SMS. Lo sentimos si no les gusta a las operadoras, pero esto es así» o que, por fin, desvelan el misterio que hay tras el «doble check».
Brian Acton y Jan Koum son una «rara avis» de Sillicon Valley. A diferencia de otros grandes personajes de la zona como Mark Zuckerberg o Tim Cook, son unos individuos relativamente poco conocidos, a diferencia de su empresa, WhatsApp. Hasta hace poco no había casi imágenes de ellos en los medios, y menos entrevistas. Parece que su «timidez» empieza a cambiar y este fin de semana hemos podido leer una extensa entrevista a ambos en El País en la que, sin muchos pelos en la lengua, dejan claros los objetivos que tienen para su servicio de mensajería.
Una oficina de Sillicon Valley que parece…una oficina
Lo primero que sorprende, según Rosa Jiménez Cano, periodista que firma el reportaje, es la austeridad de las oficinas de la empresa. Muy cerca de Google, Facebook y Cisco, en su exterior nada nos advierte que dentro se encuentra una empresa que tiene más de 200 millones de usuarios activos. Y dentro, son 40 empleados, entre los que se sientan también Acton y Kuom como uno más, los que gestionan los más de 9.000 millones de mensajes que se envían al día. No hay graffitis, bebidas, masajes y todo eso que tanto destaca cuando vemos otras oficinas de Sillicon Valley. «No nos hemos preocupado demasiado de nuestra imagen, sino de nuestros clientes, estamos orgullosos de ello. Somos una compañía de tecnología» afirma Kuom.
España, ese país…
Una de las primeras preguntas apunta directamente al éxito de WhatsApp en España (aunque no a la polémica levantada sobre su paso de ser gratuito a de pago), a lo que Jan Kuom indica «Sabemos que estamos en casi todos los teléfonos y que se usa de manera intensiva. Por eso nos preocupa dar un buen servicio en lugar de gastar el dinero en publicidad» y Brian Acton añade «vamos a seguir enriqueciendo la experiencia. No puedo desvelarlo de manera concreta, pero seguimos evolucionando. El SMS era en blanco y negro, nosotros queremos ser en color.»
¿Publicidad? Nunca
Directos y contundentes, así se muestran ambos en las respuestas como «WhatsApp no es gratis. Buscamos lo mejor para nuestros clientes y por eso es de pago. Nosotros queremos que nuestros usuarios sean nuestros clientes, no que ellos sean el producto con el que se hace negocio«, en referencia al uso de la publicidad en otras aplicaciones.
Acton recuerda su paso por Yahoo y afirma «Terminé muy harto del mundo de los anuncios en mi trabajo anterior. No quiero saber nada de eso. Pensamos que un dólar al año tanto en iPhone como en Android es un precio justo«, a lo que Kuom remata «no somos, ni queremos ser, una red social, ni una plataforma de juegos, ni un soporte publicitario. Al levantarte lo primero que haces es ver el móvil. Al acostarse lo último es eso, mirar el teléfono. ¿Pondrías ahí publicidad? Eso sí nos parece invasivo.»
¿Un dólar da beneficios?
La pregunta siguiente es lógica ¿un dólar por usuario permite un negocio sostenible? La respuesta de Kuom es categórica: «claro. No nos gastamos el dinero en publicidad en paradas de autobús o en anuncios de televisión con famosos. Confiamos en que nuestros usuarios recomienden el servicio a sus amigos.» Es evidente que en esta respuesta se esconde un dardo, más o menos envenenado, para competidores como LINE, sobre los que también comentan «si lo dan gratis y sin publicidad, no lo harán así para siempre. El coste se paga de alguna manera. La gente ya se ha dado cuenta de lo que vale su privacidad y no quieren ser hombres-anuncio. La clave está en poner un precio que sea atractivo y justo para las dos partes.»
El futuro está en el PC, y no en otros OS móviles como Firefox
En cuanto a los planes de futuro, ambos son también muy claros, en WhatsApp no habrá juegos y tampoco piensan en lanzar una versión de la aplicación este verano para Firefox OS. Lo que parece que sí pasa por sus mentes es la posibilidad de lanzar una versión de escritorio de WhastApp.
«No guardamos nada en nuestros servidores»
En sus compases finales, la entrevista entra en el pantanoso terreno de la privacidad, que tanto ha dado que hablar en la aplicación de mensajería de Kuom y Acton. «Nosotros no tenemos copia de nada [en referencia a los mensajes]. Una vez que se envía, desaparece. Solo están en nuestro servidor hasta que llega al receptor. Es lógico, nosotros no queremos saber nada de ellos. Ni sus cumpleaños ni sus gustos ni venderles nada. Solo queremos que le llegue el mensaje bien. Tampoco nos interesa lo que envíen porque no hay ningún anuncio relacionado que mostrar.»
La respuesta que todos esperaban ¿el doble check significa que han leído el mensaje?
Finalmente, los creadores de WhatsApp desvelan el misterio del «doble chek», esas dos «v» verdes que aparecen en los mensajes y que tanto han dado de que hablar. Entre risas comentan «uno es que se ha recibido en el servidor. Dos, que se ha enviado el mensaje al destinatario con éxito. Pero, ojo, eso no significa que lo haya leído, solo que ya está en su móvil.»