Cuando Google anunció la disponibilidad de su Nexus 4 para el 13 de noviembre a través de su tienda en Internet y con unas expectativas de venta demoledoras, ni la propia compañía habría podido imaginar la demanda que generó su terminal fabricado por LG. Y es que, su precio de salida rompió todos los límites y se agotó en minutos. La pena es que parece que tendremos que esperar hasta mediados de diciembre para la reposición de nuevas unidades.
Al Google Nexus 4, fabricado por LG, se le supuso un gran éxito desde que la compañía diera a conocer su existencia. Y es que sus prestaciones son propias de un terminal de gama alta: pantalla de 4,7 pulgadas de 768 por 1.280 píxeles y tecnología True HD IPS Plus; procesador de cuatro núcleos a 1,5 GHz Krait; Android 4.2 Jelly Bean; cámara de 8 megapíxeles; 8 o 16 GB de almacenamiento interno; 2 GB de RAM; DLNA; NFC; Bluetooth 4.0; HSPA+; etcétera. Pero lo mejor de este equipo no son sus prestaciones, ya de por sí buenas, sino el precio de venta al público a través de la Google Play: 299 euros para el modelo de 8 GB y 349 euros para el de 16 GB. Y claro, como los usuarios son listos, decidieron, antes de que empezara su venta, que era una opción inmejorable para conseguir un terminal libre, de excelentes prestaciones a buen precio. La consecuencia, se agotó en minutos.
La mejor relación calidad-precio
No tenemos duda de que lo que anuncia este ladillo es cierto, el problema es que no hay unidades disponibles desde el 13 de noviembre y por lo que han publicado nuestros compañeros de Android Ayuda, es probable que no haya nuevas unidades hasta mediados de diciembre, justo antes del comienzo de la Navidad. Y es que la comercialización del Nexus 4 ha sido un caos desde el principio. No solo hubo muchos usuarios con problemas de acceso y de petición de la unidad, sino que además, Google mandó un correo a muchos de los que consiguieron comprar uno para decirles que tendrían que esperar hasta tres semanas para recibirlo.
Desde que supimos lo que estaba ocurriendo hemos sido muy críticos con este punto porque no entendemos que Google, con la capacidad informática y logística que tiene, haya permitido que esto ocurra. Y peor aún, que no sea capaz de reponer unidades del Nexus 4 cuando están tan cerca las Navidades y cuando sabían de antemano que iban a tener una gran demanda. Además, conocida esta situación, tampoco tenemos muy claro que cuando lleguen los nuevos equipos sea tan fácil conseguir uno de ellos.