Esta misma semana hemos podido ver y tocar el Samsung Galaxy S3. Una toma de contacto en la que hemos realizado una primera prueba de la que os damos detalles a continuación.
Sin duda que el Samsung Galaxy S3 es uno de los móviles de la temporada. Con la fuerza que han tomado los smartphones, no olvidemos que somos uno de los países del mundo con mayor penetración de este tipo de equipos, los modelos de gama alta son siempre muy esperados. Samsung además ha sabido calentar el ambiente como nunca. Al más puro estilo Apple no cayó en el error de lanzarlo en el Mobile World Congress, sino que realizó un evento por todo lo alto “ad hoc” solo para el modelo en cuestión, de modo que todos los medios del planeta se hicieran eco del equipo.
Con anterioridad sus Galaxy S y S2 han hecho de las suyas, creando una saga de seguidores incondicionales que no quieren oír hablar de otra cosa que no sea un Galaxy. Si bien hace unas semanas no solo tuvimos el privilegio de verlo en la presentación y de contaros de primera mano cómo era, ahora hemos podido, gracias a la gente de Samsung España, realizar una pequeña toma de contacto más profunda. Como anécdota comentar que el secretismo de este modelo dentro la firma ha sido tal que los máximos responsables de Samsung en España vieron el modelo la primera vez solo dos semanas antes de la presentación.
Exterior
Sin los nervios del día de la presentación donde dos mil periodistas luchábamos por los pocos modelos que la firma había habilitado, podemos confirmar las primeras impresiones. Las fotos del terminal no hacen justicia. Es mucho más bonito, más cuidado y sobre todo mucho más recogido de lo que su pantalla de 4,8 pulgadas podía presagiar. El display es un 22% más grande que el del S2, por lo que el trabajo realizado en la reducción del marco y las dimensiones en general han sido clave. El resultado es que el S3 es solo un 16% más grande que un S2.
La pantalla, si vemos el equipo de perfil, está mucho más cerca del cristal externo, todo gracias a una nueva tecnología de fabricación que permite obtener un panel mucho más delgado que las anteriores versiones AMOLED. El display ha sido cuestionado por algunos puristas por usar pantalla Pentile, pero la verdad es que con un buen nivel de brillo no vemos motivo para criticar un panel que ofrece 306 ppi (214ppi en el S2), un nivel creemos mucho más que aceptable. Como detalle curioso comentar que el S3 permite lanzar hasta cuatro aplicaciones sin desbloquear la pantalla.
Otro punto que no podemos dejar de comentar es Smart Stay. Se trata de una prestación que analiza si estamos delante de la pantalla, de hecho sale un ojo en la barra de notificaciones, optando por apagarla en el caso de no estar delante de ella. Otro toque “humano” que mejora el ahorro de batería, siempre clave en un móvil de este tipo y que cuando lo usas funciona a la perfección.
Cerámica
De las impresiones obtenidas al tenerlo en las manos corroboramos también que el cristal que cubre toda la parte frontal envuelve todo la parte delantera con un leve abombamiento, dando una impresión excepcional. Los perfiles están también muy suavizados, de hecho desde Samsung nos confirman que uno de los objetivos del proyecto era que no tuviera línea recta alguna. Si le damos la vuelta, creemos que es importante aclarar el eterno asunto sobre un posible material cerámico. La firma ha sabido encajar las críticas recibidas en el S2 por su carcasa trasera realizada en un plástico que no acababa de gustar a muchos usuarios.
Para el S3 ha elegido un material de tacto cerámico, denominado Hyperglaze, pero que evidentemente no está realizado con componentes cerámicos por una cuestión básica, el precio sería desorbitado y su manipulación se nos antoja que sería también tema complejo. La carcasa trasera hay que decir que es necesaria cambiarla si quieres disponer de carga inalámbrica, todo a través de un cargador que llegará después del verano. Algo normal como ocurre con otros sistemas de similar factura que hay en el mercado del accesorio. Eso sí, un detalle que no se puede pasar por alto es que el tiempo de carga será del doble que el sistema de cable. Este matiz seguro que a muchos usuarios le hará plantearse la compra de este accesorio. No obstante y como siempre lo más snobs, lo tendrán a su disposición.
Mañana segunda parte de este análisis donde os daremos detalles de la cámara, autonomía y funciones internas. Como adelanto os dejamos un ejemplo de una foto real aquí.