Tras la presentación del Samsung Galaxy S III, la información que hemos ido conociendo se ha ilustrado con fotografías de todos y cada uno de los detalles del terminal. Hoy os podemos mostrar un vídeo en el que se puede apreciar cómo funciona este equipo, cómo es su interfaz de usuario, así como la rapidez y sencillez con la que realiza algunas operaciones como la transferencia de imágenes.
Lo primero que tenemos que destacar de este vídeo (4:13) es que en él se puede apreciar la fluidez y sencillez con la que se maneja el nuevo Galaxy S III. De hecho, es uno de los elementos más destacados por Samsung cuando habla del terminal.
En las primeras tomas podemos ver el exterior del equipo que tiene un peso de 133 gramos y unas dimensiones de 136,6 milímetros de alto por 70,6 de ancho y solo 8,6 de grosor (por comparar, el grosor del iPhone 4S es de 9,3 mm). Además, en las imágenes se pueden ver los dos colores con los que se van a comercializar: esa especie de azul oscuro metalizado y el blanco. En el vídeo también se recoge la idea de que el diseño y dimensiones del Galaxy S III se ajustan perfectamente a la mano.
Como se supone que es un terminal “inspirado en la naturaleza”, el vídeo también nos muestra el efecto del agua sobre la pantalla de inicio, así como los fondos de pantalla y los sonidos inspirados en la naturaleza que guarda en su interior. Pero además, es un terminal de alto rendimiento y tenemos ejemplos en la rapidez con la que se puede pasar de una pantalla a otra, así como en la navegación web.
Otros detalles
El vídeo también nos detalla otras posibilidades muy interesantes en el manejo del Samsung Galaxy S III. Así, existe la posibilidad, gracias a su procesador de cuatro núcleos, de poder ver un vídeo en alta definición (“pop up play”) y sin necesidad de pararlo, escribir un correo electrónico o un mensaje de texto de manera simultánea. Es más, se puede variar el tamaño y arrastrar a cualquier lugar de la pantalla.
La cámara de este terminal tiene una resolución de 8 megapíxeles con flash de LED y auto enfoque. También permite la detección facial y de sonrisa e incluye estabilizador de imagen. Por supuesto incluye la posibilidad de grabar vídeo en alta definición a 1080p. Lo que nos muestra este vídeo es el modo de disparo en ráfaga y la recomendación automática, por parte del software del Galaxy S III, de la mejor foto de todas las que hayamos tomado.
También incorpora un software inteligente con relación a las llamadas. El ejemplo que nos pone es cuando tenemos en pantalla la interfaz de escritura de mensajes. Si en ese momento nos llevamos el terminal a la oreja como si fuéramos a llamar, el Galaxy S III inicia automáticamente la llamada.
Por supuesto, en el vídeo también aparece el sistema S Beam para compartir contenidos (vídeo, música, fotos) de manera rápida y efectiva. A favor de este sistema: la capacidad para transferir archivos pesados a gran velocidad y que no hacen falta cables porque es un sistema inalámbrico (Wi-Fi Direct). En contra de S Beam: pues que de momento es incompatible con otros teléfonos.
Para finalizar, la idea que ha querido transmitir Samsung desde un primer momento con su nuevo Galaxy S III: el manejo intuitivo y sin esfuerzo, algo que consigue con una interfaz de usuario muy limpia.