El Motorola RAZR puede ser uno de los terminales que más impacten por su diseño, ya que posee una carcasa trasera construida en Kevlar y una pantalla del tipo Gorilla Glass. Desde iFixit nos ofrecen un completo despiece de este superterminal de Motorola.
En la página de iFixit están especializados en desmontar y mostrar las entrañas de casi cualquier dispositivo, por reciente que sea. Ahora le ha tocado el turno al Motorola RAZR, uno de los terminales más emblemáticos de la marca.
Difícil
El desmontar este terminal no será tarea fácil, de hecho se necesitan algunas herramientas bastante peculiares como el dozuki, un cuchillo japonés que vendrá muy bien para realizar determinadas partes del despiece. En iFixit necesitaron 20 pasos para desmontar por completo el terminal y en una puntuación del 1 al 10, donde el 10 es el dispositivo más fácil de reparar, el RAZR se queda con un 4, lo que demuestra que es un terminal muy bien ensamblado pero poco accesible.
Primeros pasos
En el proceso de despiece se comienza separando la carcasa trasera con sumo cuidado, ya que podrían quedar dañados los enganches que la sujetan al terminal en sí. Una vez separada se muestra la inmensa batería del terminal, muy ancha, pero de un grosor mínimo, contando con unas dimensiones 96,3 x 57,2 x 2,8 milímetros. Aún así, estamos hablando de una batería con una capacidad de 1750 mAh, algo impensable al ver su grosor y una capacidad mayor a muchos de los smartphones de gama alta del mercado.
Algunos componentes
Tras separar la batería del resto del terminal se aprecia la placa del teléfono con todos sus chips integrados a la perfección, entre los que se pueden distinguir el chip de memoria interna de 16 GB Toshiba, el chip de RAM de 4 GB LPDDR2 Samsung o el procesador de la bestia, que en este caso estamos hablando de un Texas Instruments de 1,2 GHz. Es curioso poder observar las placas base de los terminales y poder apreciar con todo lujo de detalles como en escasos centímetros se pueden alojar tantos chips, cada uno con una función diferente y esencial para el funcionamiento del sistema.
Componentes removibles
No nos podemos olvidar de piezas como la pantalla, los altavoces, el micrófono o la cámara de fotos. Todos estos componentes estarán conectados en la parte superior de la placa base y lo harán mediante fajas de conexión, para así ahorrar el máximo espacio posible manteniendo la seguridad de una comunicación precisa entre las piezas.
Fuente de quebraderos de cabeza
El RAZR se convierte en un terminal que se puede amar por su diseño, pero su reparación será sin duda una tarea solo apta para especialistas. Queda claro que cambiar alguno de sus componentes estará solo al alcance de los mejores especialistas de la firma. Son las consecuencias de tener el menor grosor del mercado.