Samsung Galaxy S Giorgio Armani: cuando el glamour y la tecnología van unidos

Samsung Galaxy S Giorgio Armani es el resultado de la fusión de la más alta tecnología de Samsung con la elegancia de la admirada firma italiana Giorgio Armani. Disponible a cambio de 700 euros, este «complemento» porta la imagen que hace honor a la prestigiosa marca de ropa preferida por los más sibaritas.
No es la primera vez que sucede, pero esta vez la colaboración entre Samsung y Giorgio Armani nos proporciona un terminal de altísimas prestaciones de demostrado éxito con un diseño acorde a la glamurosa firma italiana. En su interior nada cambia y sigue manteniendo su poderoso procesador Hummingbird de 1GHz y pantalla Súper AMOLED de 4 pulgadas.
Disponible en algunas tiendas
Si eres asiduo de los productos de Giorgio Armani tienes la posibilidad de combinar el estilo de tu ropa a la perfección con el rediseñado porte del Samsung Galaxy S Giorgio Armani. Del trabajo conjunto de estas dos conocidas compañías surge este terminal que no pasa por alto ni el más mínimo detalle. Empezando por su rediseñada carcasa, que destaca por unas líneas más afiladas y un cambio total tanto de la parte trasera como delantera hasta el embalaje, acorde a la situación. También dispone de software que da su toque personal y contenido exclusivo. La transformación engorda el terminal hasta los 123 gramos y engrosa su precio unos 200 euros más si tenemos en cuenta su precio original. El resultado: un terminal personalizado por una de las más prestigiosas firmas de moda a cambio de 700 euros.
Sus prestaciones se mantienen intactas, con la brillante pantalla Súper AMOLED de 4 pulgadas, y su poderoso conjunto de procesador Hummingbird de 1GHz y GPU PowerVR SGX540. La cámara digital se mantiene en 5 megapíxeles y repite con el sistema operativo Android 2.2 Froyo perfilado con la interfaz gráfica TouchWiz 3.0 de Samsung. Ahora la elección es solo tuya. Tú decides si te compensa portar en el bolsillo de tu abrigo un terminal de exclusivo diseño, eso sí, a cambio de cerca de 200 euros más respecto a la versión original del fabricante coreano.