La tecnología del USB Type-C está siendo adoptada por las marcas como sustituta del ya viejo micro USB. Pero a diferencia de este parece que usar otros cargadores que no son los oficiales de cada marca puede provocar consecuencias negativas. Que se lo digan al HTC 10, que parece sobrecalentarse en exceso cuando el dispositivo usado no es de su marca.
HTC lo implementó en su smartphone más reciente. LG también. Huawei igual. Y parece claro que el USB Type-C ha venido a quedarse no sólo como sustituto más eficiente del micro USB para gestionar la carga, sino incluso como puerto de audio en detrimento de los ‘jack’ 3.5 para proporcionar una calidad de sonido digital que las clavijas no logran y que también podrían estar en riesgo de extinción.
Pero el USB de tipo C puede ser también un arma de doble filo, ya que se ha demostrado que si el fabricante no respeta las especificaciones que todos los cables de esta clase deben cumplir, el riesgo de problemas graves como sobrecarga, sobrecalentamiento y daño del terminal están a la orden del día. Y si no que se lo digan al HTC 10, que parece no querer admitir otros cargadores más que los que vienen con el propio smartphone en su caja.
Sobrecalentamiento Quick Charge 3.0
Jerry Hildebrand, redactor de Android Central, escribió un post en el que detalla el problema que tuvo con su HTC 10 cuando intentó cargarlo sin darse cuenta con el cargador que venía con su tablet Pixel C, que tiene el mismo puerto USB Type-C, aduciendo que el terminal se sobrecalentó tanto que se desconectó, aunque al enfriarse funcionó de nuevo correctamente. De hecho, al probar con otros cables y cargadores de distintas marcas, el mismo móvil le advertía que no se iba a recargar.
Benson Leung, un ingeniero de software en Google que analiza este tipo de USB en sus post y dictamina qué marcas vendidas en Amazon son de fiar y cuáles no, señaló que tanto el HTC 10 como el LG G5 usan el conector Tipo C pero violan sus especificaciones de carga al usar el estándar Quick Charge 3.0 de Qualcomm, que puede llegar a un voltaje de 20 voltios cuando el USB Type-C no admite más de 5 voltios. Lo curioso es que entonces no debería haber problemas si un dispositivo como el HTC 10 se carga con un cargador estándar de 5 voltios como el del Pixel C más allá de que se recargaría despacio., pero ya vemos el problema que tuvo Hildebrand.
Desde HTC recomiendan que sólo se usen los cables y adaptadores que vienen en las cajas de los terminales u otros de «marcas respetables», y que su carga rápida 3.0 está conforme a las especificaciones Qualcomm. No obstante parece que de momento habrá que seguir teniendo cuidado con los USB Type-C, sobre todo porque los problemas que han creado la cantidad de cables que no respetan las normas de fabricación han contribuido a la creación del USB 3.0 Promoter Group y un protocolo de autentificación que se convierta en estándar.