Los nuevos Galaxy S7 llevan ya una semana siendo, con mucha diferencia, el foco de atención de la actualidad móvil, no solo por tratarse del flagship de los coreanos para este año 2016 sino porque Samsung ha generado un hype brutal por primera vez, al hacer coincidir casi al instante la presentación del producto con la posibilidad de reservarlo en (casi) todo el planeta.
Mejores expectativas
Este lanzamiento tan medido y sincronizado que ha llevado a cabo Samsung está provocando que muchos operadores hayan agotado en muy pocas jornadas las existencias de estos Galaxy S7 aunque también es cierto que desde la tienda oficial de los coreanos en internet se siguen manteniendo los mismos plazos de entrega para el 11 de marzo, fecha en la que llegará a las tiendas oficialmente.
El caso es que un medio coreano ha puesto cifras a ese éxito de Samsung que, antes de abril, habrá fabricado más de 17,2 millones de Galaxy S7 y Galaxy S7 edge, una cantidad que está por encima de lo conseguido el año pasado con los Galaxy S6 y Galaxy S6 edge.
Para poner estos 17,2 millones de unidades en perspectiva, decir que en 2015 los coreanos vendieron algo más de 15,8 millones de Galaxy S6 (y Galaxy S6 edge) en los primeros tres meses en las tiendas. Es decir, que si llegó el 11 de abril, estamos hablando del periodo que comprende hasta el 11 de julio. Antes, el Galaxy S4 en 2013 fue capaz de vender en esos primeros tres meses más de 15,2 millones de smartphones, dato que el Galaxy S5 en 2014 no consiguió superar y que significó el cambio de rumbo de Samsung y esa apuesta decidida por el mercado premium que supusieron sus tope de gama a partir de 2015.
Lógicamente, que Samsung fabrique 17,2 millones de teléfonos no significa que los vayan a vender todos pero de hacerlo, estaríamos ante el mejor lanzamiento de los coreanos que hayan realizado jamás, ya que batirían las marcas de la anterior generación sobradamente y podrían disponerse a enfrentar el verano con el mercado completamente monopolizado por sus tope de gama.