El NFC (Near field communication) o tecnología de conexión por contacto es uno de los grandes avances que incorporan los teléfonos móviles o smartphones que actualmente podemos comprar. Curiosamente y como pasó con el Bluetooth, a pesar de tener infinitas ventajas, se va introduciendo poco a poco en el mercado, pero no de una manera veloz, aunque sí con paso firme.
El NFC básicamente lo que consigue es que dos dispositivos se conectan entre sí simplemente con que se toquen y puedan intercambiar todo tipo de información y datos. Para ello, cada uno de los equipos que lleve el NFC, tiene una zona que generalmente está identificada con un icono, qué es la que tiene que tocar con el otro dispositivo para que se conecten. Una vez realizado ese gesto basta con que desde la pantalla del móvil aceptemos la conexión.
Las ventajas del NFC son enormes. La primera que se nos ocurre, por ejemplo, es que es muy práctico para conectar altavoces inalámbricos. Enciendes el altavoz, acercas el móvil, haces que te toquen y listo. Otra ventaja del NFC es que a pesar de tratarse de una conexión inalámbrica, no consume mucho batería algo que siempre es importante cuando utilizamos un smartphone con una gran pantalla como es el caso del Huawei G8.
Las etiquetas
Una de las aplicaciones más cómodas y prácticas que tiene el NFC son las etiquetas o perfiles. Consiste en fijar un funcionamiento determinado del teléfono móvil en función de dónde está, por ejemplo en el coche, en casa o en la oficina. De manera que el móvil se comporte cómo tú le has ajustado, es decir con un determinado volumen o tono, con el GPS y el WiFi activo o no… para que todo eso pase basta con tener una etiqueta que es una especie de pegatina o pequeña pieza de plástico, por ejemplo, en la oficina y tocar con el móvil en la etiqueta o pieza de NFC para que el Huawei G8 empiece a funcionar cómo tu les ha dicho.
Compartir la WiFi y pagar con el móvil
Los usuarios más avanzados con Lollipop pueden compartir la clave de su conexión WiFi de una manera bastante sencilla utilizando el NFC, ya que se puede generar una etiqueta NFC para que otra persona “copie” vía NFC la clave de nuestra WiFi. Es una prestación muy cómoda cuando estás en casa o en el trabajo y alguien te pide la siempre compleja clave del WiFi. Otra de las grandes funciones del NFC es el tema de la banca on line. Actualmente cada vez son más los bancos que están habilitando sistemas de pagos vía NFC que van integrados en el teléfono móvil. Es tan sencillo como que a la hora de pagar podrás utilizar el teléfono móvil como tarjeta de crédito móvil simplemente con un tocar con el terminal de pago. Genial.