Nos guste más o nos guste menos, los teléfonos de Apple son siempre una sensación. Y también son los modelos que usan los diseñadores para, meses antes, hacer que nuestra imaginación vuele, casi siempre demasiado algo, viendo como realizables algunos conceptos increíbles que, si por casualidad algún día dan en el blanco, nos vamos a quedar con la boca abierta. Es el caso del que se nos presenta hoy, un iPhone 7 que recoge los últimos rumores en un diseño con pocas posibilidades de hacerse realidad, pero que si fuera verdad sería impresionante.
Está basado en rumores, lo sabemos. Es un diseño que parte de la imaginación de un diseñador que no ha pisado por Cupertino, también lo sabemos. Pero no podemos resistirlo. Los conceptos de los terminales que tienen que venir nos encantan, sobre todo porque plasman en una imagen fácil admirar todos esos rumores de los que tantas veces hablamos.
Y puede parecer que empezamos pronto con los del iPhone 7 cuando todavía los iPhone 6s y 6s Plus tienen que enfrentarse a su prueba de fuego, las Navidades 2015, pero al igual que los que crean estas espectaculares imágenes, a nadie le cobran por soñar (aún) y nos permiten echar un vistazo y especular con lo que podría hacer Apple – y que nunca hará -.
Tres rumores que podrían convertirse en realidad
En esta caso, podemos ver cómo el concepto de iPhone 7 que se nos presenta está fraguado en tres rumores principalmente. El primero de ellos es que contaría con el sensor de huella dactilar debajo de su pantalla en lugar de bajo el botón Home. Es más, este concepto apuesta por un diseño sin ningún tipo de botón físico en el equipo, algo que nos parece hartamente improbable en algún momento. Finalmente, también se han fijado en una de las últimas adquisiciones de Apple, la empresa Linx, propietarias de unas particulares cámaras con sistemas de multilente que son capaces de dar ese efecto «3D», también llamado bokeh, sin necesidad de una doble óptica. Esta es la parte más lúdica, porque lo que de verdad mejoraría con ellas son las instantáneas en entornos de poca luz.
Estos son, digamos, los pilares sobre los que se basa este concepto que, por otra parte, en e la parte del diseño apuesta por un gran phablet con los acabados de los últimos MacBook o iPad Pro – precisamente el producto que se estrena esta semana en las tiendas – de los que también se importa el conector. Por otra parte, también vemos semejanzas con algún que otro terminal de Huawei (Mate 7 por ejemplo), y la característica curva en la carcasa trasera de terminales como los Nexus o los Motorola.
Con esta mezcla tan particular, nos presentan los terminales de Apple en dorado, gris, plateado y, como no, Rose Gold que parece un tono que ya no abandonará los productos de Apple de aquí en adelante – o al menos los diseñadores también apuestan por él -, y se atreve con uno en azul marino.
¿Qué os parece este iPhone 7? ¿Os gustaría, a los amantes de la marca de la manzana, que el próximo terminal de Apple fuera así?