El 29 de junio de 2007 Apple ponía a la venta el primero de los smartphones de nueva generación, el iPhone, cuyo concepto ha servido de base para crear el actual mercado tecnológico en el que vivimos. Ese siempre estar conectados, a todas horas y en cualquier lugar, sin límite de ningún tipo y con la facilidad de uso que permiten las pantallas táctiles.
Ya, ya sabemos que los teléfonos eran inteligentes antes incluso de que Steve Jobs presentara el suyo en aquella histórica Keynote de 2007, pero lo que no se le puede negar a la compañía de Cupertino es el acierto de haber quitado de los viejos móviles todo aquello que no era usable, para introducir una serie de convenciones táctiles que ahora mismo son tan naturales casi como el respirar.
Solo llegó a EE.UU.
Aquel primer iPhone no se vendió fuera de las fronteras de los EE.UU. porque aquella Apple no era la Apple de ahora. Su red de tiendas era muy pequeña fuera del país y las estructuras de distribución todavía no estaban preparadas para un producto que venía vinculado a un contrato de 2 años con AT&T (que había colaborado en su desarrollo). Solo a partir del modelo 3G ya sí hubo una estrategia global que incluiría exclusivas con determinadas operadoras (Movistar en España).
Aun así, a pesar de esa distribución limitada, el iPhone (2G le llaman algunos) vendió aproximadamente 6,1 millones de unidades, unas cifras que, aun siendo modestas si las comparamos con las que vinieron más tarde, pueden considerarse un hito en aquel mercado de la telefonía de 2007.
Aquel primer iPhone era un terminal con un procesador ARM de 412MHz, pantalla de 3,5 pulgadas 320×480 pixels de resolución, conectividad GPRS y Edge, capacidad de 4, 8 y 16GB de almacenamiento interno, cámara principal de 2MP, Wifi y Bluetooth.
Un iPod, un teléfono… ¿lo entendéis?
iPhone es ahora la marca de móviles más vendida del planeta, precisamente desde ese 29 de junio de 2007. En marzo de 2014 los de Apple ya llevaban vendidos 500 millones de smartphones y en los 15 meses que han transcurrido desde entonces, fácilmente puede haber alcanzado los 600.
Eso convierte las críticas (vistas con el ventajismo que da la perspectiva del tiempo) que recibió en su día en bromas de mal gusto porque no solo obligaron a rectificar a los que pensaban que no triunfaría, sino que al final ha servido de modelo para muchos de los OS y plataformas que hoy en día tenemos en el mercado.
Estamos todos de acuerdo en que la revolución móvil que nos ha tocado vivir empezó ese 29 de junio de 2007, cuando el iPhone salió al mercado. Un dispositivo que fue presentado por Steve Jobs a su entregada audiencia como «un iPod, un teléfono… ¿lo entendéis?«, y que si hoy tuviéramos que utilizar otra fórmula para presentarlo sería tan sencilla como decir iPhone, a secas. ¿No os parece?
Os dejamos con un divertido vídeo (sin ánimo de molestar) que enseña lo incomprendida que fue la radical, y por lo tanto arriesgada, apuesta que Apple puso en el mercado del año 2007 con su primer iPhone. ¿Creéis que muchos de nosotros no dijimos lo mismo que Steve Ballmer?