Pese a que se sabe casi todo del LG G4 tras la filtración de su página web la semana pasada, había un detalle era discordante con todo lo que conocíamos, su procesador. En la filtración se mostraba que sería un quad-core a 2.5 Ghz pero parece que finalmente se confirma lo que se había comentado, que contará con el Snapdragon 808, el hexacore que se queda un paso por detrás del Snapdragon 810 que si tiene el LG G Flex 2 y que tanta polémica con su calentamiento ha provocado.
Cómo se venía comentando, el procesador del LG G4, casi uno de los únicos datos que no se filtraba con el resto de la publicación del microsite del dispositivo el fin de semana pasado, será un Snapdragon 808 de Qualcomm.
Es curiosa esta elección que no por menos esperada, esta dado casi ya por seguro, pero lo coloca un paso por detrás de sus competidores, con los Snapdragon 810 octa-core, con un chip hexa-core capaz de desarrollar una frecuencia combinada de 1,44 Ghz. Cuenta con cuatro núcleos Cortex-A53 y otros dos Cortex-A57, en lugar de los cuatro de este tipo que lleva el Snapdragon 810. Completan sus características una compatibilidad con tecnología de 64 bits y GPU Adreno 418 en lugar de la Adreno 420 que tiene el otro chip de Qualcomm ya presente en el LG G Flex 2.
Todos estos datos se han obtenido gracias a un pantallazo de un, supuesto, LG G4 con la aplicación CPU-Z, un software que desvela hasta el último de los detalles técnicos de un dispositivo y donde, por otra parte, vemos un punto que debe ser un error, o sorpresa mayúscula, porque se indica que la arquitectura de CPU de este Snapdragon 808 es Krait 450, la misma que tenía el Snapdragon 805 y que se suponía que ya no utilizaba este fabricante.
Sea como fuere, aún habrá que esperar un par de semanas para desvelar los pocos misterios que tiene ya escondidos el LG G4 tras conocer casi todos ellos la pasada semana. Aunque la marca mantiene su apoyo a Qualcomm y sigue utilizando sus chips, ya han surgido rumores y los primeros terminales utilizando procesadores propios y, quizás, la polémica del calentamiento del Snapdragon 810, que salpicó incluso al HTC One M9, ha querido evitarse con el LG G4 reduciendo el número de núcleos y, sobre todo, de aquellos en los que parece residía el problema.