Las aplicaciones de mensajería suelen ser de las más populares pero la mayoría tienen un problema y es que no están diseñadas para gestionar eficientemente los distintos ámbitos por los que nos movemos en nuestra vida diaria. Es decir, no podemos separar cuando nos llega un mensaje personal de otro profesional y si no andamos con cuidado, podemos acabar escribiendo en el ‘chat’ equivocado. Por lo que soluciones como Caliber nos van a venir de maravilla.
Solo para uso profesional
Caliber marca el terreno desde el principio y solo dejará que podamos conversar y escribirnos con los contactos que tengamos en Linkedin o, en su defecto, que busquemos en su basta red social para hablar con alguien que nos interese por alguna razón: información, consejos, presentarnos, enviar nuestro CV, etc.
De esta manera, quedan fuera de cualquier injerencia las conversaciones puramente personales que podamos mantener vía WhatsApp, LINE, Telegram, Hangouts, etc., y no volveréis a tener que pedir disculpas por alguna gracieta que no estaba prevista que leyera vuestro jefe, sino vuestro amigo del alma.
Accede con tu cuenta de Linkedin
La aplicación, que la tenéis disponible tanto en iOS como en Android, se usa de una manera muy sencilla aunque antes de seguir, debéis tener en cuenta una cosa: para poder mantener una conversación con uno de vuestros contactos los dos debéis tener instalado Caliber. En caso de que uno de los dos no lo tenga todavía, podrá recibir una invitación vía mail para que se conecte y entonces sí, empezar la conversación.
Nada más instalarla veréis que os pide ‘loguearos’ con Linkedin. Aunque lo hagáis, más tarde vais a tener que configurar una nueva contraseña, en esta ocasión para la propia Caliber ya que la ‘info’ de vuestra cuenta en la red social la almacenará permanentemente dentro de la ‘app’.
Una vez que ya estamos dentro, tendremos que elegir una categoría profesional de nuestro perfil como la principal que mostrará a los demás. Es decir, de entre todas vuestras habilidades, la que más os defina. Inmediatamente después tendréis que escoger las categorías de profesionales con los que queréis conectar, al margen de la lista de contactos que ya tenéis en Linkedin y a la que vais a poder acceder una vez que pulséis sobre la pestaña de chats.
Aunque es un buen comienzo, todavía le faltan algunos detalles importantes como la gestión de grupos, por si las empresas quieren empezar a usarlo como vía preferente de comunicación. Pero lo cierto es que tal y como está ya nos permite disponer de una herramienta orientada 100% al ámbito laboral.
Probadla y contadnos qué os parece.