A pesar de que en un primer momento se habló de la posibilidad de la venta de 02 a BT (British Telecom) se han cumplido las previsiones de los últimos días y será Three la que adquiera la filial británica de la operadora española en una operación de 10.250 millones de libras, lo que al cambio son cerca de 13.500 millones de euros.
Telefónica ha anunciado el inicio de las negociaciones con Hutchinson Whampoa, un conglomerado internacional con base en Hong Kong en el que se figura la operadora británica 3 (Three) para la venta de O2, su enseña en Reino Unido por 10.250 millones de libras que se dividirá en un pago inicial de 9.250 millones de libras (cerca de 12.200 millones de euros) cuando se cierre la operación y uno adicional y aplazado de 1.000 millones de libras (1.300 millones de euros).
Estas negociaciones en exclusiva, por otra parte, tienen un periodo de exclusividad de unas semanas para asegurar que nadie puede entrometerse mientras se cierran los contratos – que por otra parte es difícil que se rompan a estas alturas cuando se ha hecho el anuncio oficial – y que además coinciden con los plazos requeridos por las autoridades británicas en estos casos.
Se uniría en operador con más clientes y el más competitivo
Actualmente, 02 es la operadora líder en Reino Unido por número de clientes, 24,08 millones de usuarios, que Telefónica adquiría en 2006 a BT por 26.000 millones de euros, aunque hay que recordar que en esa operación se incluían los negocios en Irlanda, que irán con el paquete que se vende ahora, y de Alemania, que quedaría aún en manos de Telefónica.
Por su parte, Three es la que tiene ahora mismo un crecimiento más sostenido gracias a una agresiva política de precios en las que ofrece, entre otras cosas, dos modalidades estrella: tarifa sin límite de datos y 600 minutos o 4G y sin límite de minutos por 20 libras (permanencia de 12 meses) o 23 libras sin permanencia al mes. Además, es la primera operadora europea que cuenta con una oferta de roaming gratis, incluyendo España a partir del mes de abril cuando sus clientes podrán viajar a nuestro país y seguir utilizando su línea como si estuvieran en las islas británicas.
¿Y entonces, que hay de la idea del super-operador europeo?
Queda lejos, por tanto, la idea del «Super-Operador» europeo que parecía que podría surgir de haber fraguado el acuerdo entre Telefónica y BT, por el que la española entraría a formar parte de la británica a cambio de 02 y poder así ofrecer una oferta convergente, un mercado todavía «virgen» y sin explotar en Reino Unido donde todavía no se ha dado el paso al nivel que se hace en España.
Llevamos tiempo escuchando a las operadoras europeas la necesidad de una convergencia en el mercado de las telecomunicaciones a nivel europeo dado el peligro del músculo financiero de su competencia americana, con AT&T a la cabeza que tras su inversión en FCC controla, indirectamente, parte del accionariado de Yoigo. La promesa es siempre la misma para el usuario, habría más capacidad de inversión con un mercado más grande que permitiría ofrecer ofertas más competitivas. Además, alejaría el fantasma de la subida de precios tras la retirada del roaming en la Zona Euro, supuestamente, en diciembre de este año pero que todos los indicios apuntan a que se retrasará, y bastante. Aunque eso sí, con un super-operador europeo supone sería en el desarrollo de las infraestructuras, ya que la factura, y la financiación, de mejores redes tanto móviles como fijas se soportarían con una base de clientes más amplia y una empresa más grande.