La Surface Pro 3 es uno de los gadgets más difíciles de reparar
Anunciada el pasado mes de mayo, la Surface Pro 3, que la semana pasada volvía a la actualidad ya que en su manual se ha mencionado de forma explícita a la Surface Mini, ha pasado y suspendido estrepitosamente los test de reparabilidad de iFixIt con una nota de 1 sobre 10.
No sólo los smartphones pasan por las manos de iFixIt para desmontarlos pieza a pieza y conocer si son más o menos fáciles de reparar, lo que repercute en el coste de lo que cuesta su paso por el servicio técnico fuera de garantía. En este caso se trata de un tablet, la Surface Pro 3 de Microsoft que, por otra parte, no sale muy bien parada.
El proceso de desmontaje de la tableta del gigante de Redmond se puede calificar de casi imposible. Y es que en el primer paso, y no estamos hablando de unos «manazas» sino gente experta precisamente en esta labor, los responsables de iFixIt no han podido evitar que se rompa el cristal de la pantalla. Según indican, no es que esté más o menos sujeto, sino que el cristal utilizado es más frágil que el de anteriores modelos, quizás buscando una reducción del peso. Esto se une a que es menos flexible, y da como resultado la posibilidad de romperlo más fácilmente.
Una vez pasado esta etapa, según indican en este portal, la cosa no mejora mucho y está en la línea de los anteriores modelos de los tablets de Microsoft que, precisamente, no se han destacado por ser fácilmente reparables. En especial se señala lo difícil que es retirar la batería para sustituirla, algo que con el tiempo no sería extraño tener que hacer, y que resulta casi imposible debido al pegamento que utiliza el fabricante para fijarla. Eso sí, la sustitución del disco SSD es de lo más sencilla, eso sí, si no nos dejamos la pantalla en el camino.
Estos elementos han provocado que el tablet de Microsoft obtenga una nota de tan sólo un punto sobre diez en cuanto a sus posibilidades de ser reparado fácilmente, una de las más bajas que hemos visto en los últimos tiempos, superado incluso por el HTC One M8 que obtenía también un paupérrimo resultado de 2 sobre 10 o los Galaxy S5 y OnePlus One con su aprobado raspado, lejos aún del LG G3 y su sólido 8 sobre 10.
Fuente: iFixIt