Si una cosa funciona, no la cambies. Eso es lo que han pensado en HTC respecto al diseño del terminal que hemos probado. Este, mantiene las líneas y materiales del One por lo que su aspecto es espectacular. Eso sí, el HTC One Mini es un modelo que incluye una pantalla de 4,3 pulgadas a 720p.
Evidentemente, y al estar enfocado como producto de gama media, este modelo ofrece unas especificaciones no tan espectaculares a las de su “hermano mayor”. Un ejemplo es su procesador, que es un Qualcomm de doble núcleo modelo Snapdragon 400. Además, su RAM es de 1 GB… no son malas características, como pudimos comprobar, pero no llegan al nivel del modelo superior. Eso sí, el HTC One Mini es de lo mejor que se puede encontrar en este apartado en su gama de producto.
Otros detalles que nos han parecido destacables en la prueba que hemos realizado es que el HTC One Mini incluye una cámara con sensor tipo UltraPixel, incluye la interfaz Sense 5 (con todas sus novedades que, realmente son interesantes) y una forma muy particular de insertar la tarjeta SIM. Por ello, y por el buen rendimiento que ofrece, es un modelo que se debe tener en cuenta como solución para el día a día y que permitirá a la compañía taiwanesa acceder a la gama media de producto, algo que realmente necesita.
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