El Samsung Galaxy Note 2 ha sido uno de los teléfonos más rápidos y potentes del mercado. Con su procesador Exynos 4412 mostraba una frecuencia de reloj de 1,6 GHz realmente rápida, pero la aparición de otros terminales con procesadores más potentes hace que el paso del tiempo sobre él se note aún más.
Cuando fue lanzado el Samsung Galaxy Note 2 era uno de los terminales más potentes y más veloces que había en el mercado, pero la llegada de otros dispositivos con procesadores Snapdragon más modernos ha hecho que el paso del tiempo se note más en este teléfono. Su procesador un Exynos 4412 funciona a una frecuencia de reloj de 1,6 GHz, que no está nada mal pero quizá en comparación con otros procesadores más modernos se quede un poco atrás y más cuando se comienzan a instalar aplicaciones y demás. Pero hay una forma de comprobar cómo funcionaría el terminal si se aumenta la velocidad de frecuencia del procesador, es decir realizar un overclocking, para que veáis como sería el funcionamiento os mostramos un vídeo que han realizado los chicos de Pocketnow, en el que se aumenta la frecuencia hasta 1,8 GHz.
A continuación os dejamos el vídeo en cuestión:
En el vídeo se muestra como realizar el overclocking en el Samsung Galaxy Note 2
En el vídeo que os acabamos de dejar se muestra el funcionamiento del Samsung Galaxy Note 2 antes de ser overclockeado y después. En un terminal la velocidad de respuesta puede verse modificada según se vayan instalando aplicaciones y demás, por tanto si se quiere algo más de potencia puede forzarse el procesador para aumentar su frecuencia y en el vídeo muestran los pasos que van haciendo para aumentar la velocidad de 1.600 MHz hasta 1.800 MHz, es decir 200 MHz más, además de poder el tiempo durante el que se quiere que funcione a esta frecuencia.
Seguidamente, realizan varios benchmarks, como AnTuTu para comprobar el rendimiento una vez forzado. Se comprueba que realmente el rendimiento es mayor comparándolos a 1.600 MHz y a 1.800 MHz, además de apreciarse que la estabilidad no sufre variaciones, lo cual hay que tener en cuenta.
Un detalle importante que hay que dejar claro es que al forzar el Samsung Galaxy Note 2 para aumentar la frecuencia se corre el riesgo de que el procesador también aumente la temperatura y pueda sufrir daños, por tanto, actúas bajo tu propia responsabilidad.