La presentación de los nuevos Nexus, especialmente los Nexus 4 y Nexus 10, ha sido un acto muy celebrado, principalmente por la relación entre sus características y precio. Sin embargo, existe un punto en el que buscador y usuarios no comparten ideas. Y es que la ausencia de soporte para tarjetas micro SD en los últimos Nexus presentados ha decepcionado a los potenciales compradores. Matías Duarte, uno de los responsables del desarrollo de Android, ofrece la visión de la compañía y los motivos que les han llevado a esta decisión.
Sin duda, los nuevos Nexus 4 y Nexus 10 han tenido una calurosa acogida. Y es que el precio fijado por el buscador ha sido toda una sorpresa. Un factor tan importante como éste y las sensacionales características técnicas de los dispositivos los colocan como la alternativa más seductora. La reacción de los usuarios ha sido instantánea, aunque la mayoría coincide en la misma crítica, un “defecto” que empaña la imagen de un producto que podría haber sido redondo.
Los Nexus, en el punto de mira, para bien y para mal
Tras la vorágine causada por tanta novedad “made in Google”, los usuarios recién empiezan a madurar todos los anuncios de la compañía. Por encima de Android 4.2, sus novedades o el estreno de Google Music en España, han sido tabletas y smartphone los que más miradas han centrado. No es para menos si tenemos en cuenta que el buscador ha decidido que sus dispositivos se impongan en un mercado saturado a base de talonario, al menos así entendemos la venta de un dispositivo con la que la compañía extraerá un margen de beneficio muy bajo o incluso tal vez negativo. Recordemos que el Nexus 4 de 8 GB costará 299 euros…
Los motivos de Google a la falta de memoria externa
Sin embargo, a pesar del reducido precio, las características de los nuevos Nexus no son perfectas. Los usuarios no dejan de reprochar la ausencia de un slot para tarjetas micro SD que al menos logren subsanar el problema que derivará el uso de un dispositivo con menos de 8 GB de memoria interna. Dada la situación, Matías Duarte, jefe de diseño de la interfaz y experiencia de usuario en Android ha decidido contestar algunas dudas en torno a las novedades de Google a través de la red social del buscador, Google +.
Cómo no, el tema más debatido y que más preguntas ha generado ha sido la controvertida ausencia de slot de memoria externa, a lo cual, el directivo de la firma no ha dudado en responder. Según éste, Google se ha decantado por este sistema de almacenamiento ante la confusión que, según Matías, genera la presencia de dos módulos de memoria (la interna y la propia tarjeta de memoria). Él argumenta que muchos de los usuarios en ocasiones desconocen dónde se almacenan sus fotos y vídeos, lo cual genera desconcierto, efecto que puede generar una opinión negativa sobre el funcionamiento del sistema. Ante esta situación, el equipo de desarrollo optó por la memoria interna como almacenamiento exclusivo.
Aciertos y equivocaciones
Desde nuestro punto de vista, reconocemos la problemática que puede causar dicho sistema de almacenamiento a personas con escasos conocimientos en la materia. Sin embargo, no estamos de acuerdo con la solución. Nadie concibe un smartphone con 8GB de memoria interna, por mucho que Matías Duarte defienda que el usuario se amolda a la capacidad del dispositivo. Todo aquel que disfrute en de un smartphone de estas características en toda su extensión sabe que de esos 8 GB, el usuario dispone de una cantidad muy inferior pues el propio sistema requiere su utilización. Además, la instalación de numerosas aplicaciones, por no mencionar los juegos, reduce la memoria en gran medida. Sistemas de almacenamiento en la nube como Dropbox y Drive no son la solución, al menos si tenemos en cuenta los límites de descarga de las tarifas de datos ofrecidas por las operadoras y la misma velocidad y estado de las redes en las diferentes localizaciones por las que nos movamos. La solución más factible sería la comercialización de versiones de mayor capacidad (32 GB es una cifra razonable), aunque como es lógico eso repercutiría en el precio final.
