La guerra que libran Apple y Samsung desde 2011 ya tiene un primer veredicto. El jurado del tribunal federal de San José (Estados Unidos) ha condenado a Samsung a pagar 1.000 de dólares por copiar tres patentes usadas en el iPhone e iPad. Llama la atención que en el caso del Samsung Galaxy Tab Samsung ha ganado la batalla al no recibir cargo alguno por este modelo.
Ante esta situación Samsung tiene catorce días para presentar las alegaciones pertinentes en pos de evitar o cuando menos reducir la cuantía de la firma. Las dos empresas muestras posturas muy diferenciadas sobre la sentencia. Si bien Apple acepta de buen grado la sentencia, ésta no ha llegado a los 2.500 millones de dólares que pedía de indemnización. Evidentemente Samsung quien pedía 400 millones por el uso de su patente WiFi, ha manifestado que recurrirá, asegurando que es una decisión negativa para los consumidores americanos porque afecta a los niveles de competencia. Esta primera sentencia previa es también un aviso a navegantes para firmas como HTC, Sony o Motorola que están también inmersas en sendos juicios con Apple.
Detalles
Centrándonos en el contenido de la sentencia el tribunal estima que Samsung copió los iconos de Apple en sus móviles Android así como la tecnología para ampliar y reducir el tamaño de lo que vemos en la pantalla (patentes 915, 163 y 381), lo que se conoce en los mentideros tecnológicos como “pinch-to-zoom”. Si la medida va adelante Samsung podría ver cómo afecta en los Estados Unidos no solo a productos actuales, como el Galaxy S3, sino incluso a modelos antiguos de su línea de telefonía. Samsung vendió el año pasado más de 50 millones de móviles en el país de las hamburguesas y la comida rápida.