Hace un mes, Purnima Kochilar, jefe de relaciones con los desarrolladores de Nokia, comunicaba que la compañía finlandesa iba a utilizar Symbian y Windows de manera indistinta durante varios años. Algunos analistas hacían predicciones sobre la permanencia de Symbian en el mercado, mencionando como fecha clave 2016. Hoy es Stephen Elop, CEO de Nokia, el que ha confirmado esta fecha.
En una entrevista a Elop en Nokia Conversation, el CEO de Nokia ha dejado claro que las actualizaciones de software para dispositivos Symbian estarán disponibles “por lo menos hasta 2016”. Así que ya no hay que predecir ni elucubrar más sobre este punto. Elop ya había dicho, cuando se firmó el acuerdo con Microsoft, que Windows Phone pasaría a ser el sistema operativo principal de los teléfonos inteligentes de Nokia pero que aún tendrían que lanzar 150 millones más de dispositivos Symbian.
Pensemos que Elop ha dicho “hasta por lo menos” 2016 y es seguramente es una fecha bien calculada por Nokia. Quizá los Symbian sigan en el mercado hasta que Nokia consiga un determinado nivel –en volumen– de equipos con Windows Phone, o los Symbian se conviertan en smartphones con un precio por debajo de 150 euros. Aunque la verdad, ya podemos encontrar terminales fabricados en China o en la India similares, con Android, a ese precio.
Ahora la cuestión es que si ya conocemos cuál será la siguiente actualización de Symbian, Anna ¿qué pasará después de ella? En principio se supone que los dispositivos Symbian^3 serán los que reciban Anna, casi siete meses después de darlo a conocer. Si se supone que Symbian va a vivir por lo menos hasta 2016 ¿qué pasará en un par de años?, ¿qué actualizaciones van a recibir los smartphones Symbian? Todo esto teniendo en cuenta la reestructuración de personal que está llevando a cabo a Nokia y que afecta en gran medida a ingenieros y a los departamentos de desarrollo de software. Conocer los plazos y cómo van a funcionar los nuevos dispositivos en el mercado es algo que se puede predecir pero no se puede saber a ciencia cierta, así que es posible que los planes de Nokia se vayan ajustando a media que se lancen los primeros equipos con WP7. Lo que está claro es que toda esta situación genera incertidumbre en los usuarios de Symbian.