Los usuarios que tienen un Galaxy S en Estados Unidos podrán actualizar su terminal a Android 2.3 en el mes de marzo. Realmente, lo interesante de esta noticia es la situación de Samsung y de sus Galaxy en USA ya que las actualizaciones se han sucedido lentamente y aún hay terminales atrapados en Android 2.1 Eclair.
Según fuentes de Samsung en Alemania, los usuarios de los Galaxy S están de enhorabuena porque podrán actualizar el sistema operativo de su smartphone. Si esta información es cierta, el Galaxy S será uno de los primeros terminales en recibir oficialmente la actualización a Gingerbread que no se ha hecho esperar tanto como Froyo, la 2.2.
La verdad es que el tema de las actualizaciones se está convirtiendo en un tema bastante delicado y que los usuarios están empezando a considerar a la hora de la compra. El sistema operativo que consiga con eficacia tener en el mercado sus actualizaciones será el que prevalezca sobre la competencia.
El Galaxy S i9000, con sus 4 pulgadas de pantalla y una resolución de 480 x 800 píxeles se lanzó sobre el mes de junio de 2010 en Europa con sistema operativo Android, versión 2.1 Eclair y con la promesa de poderse actualizar rápidamente a 2.2 Froyo. Tras los retrasos iniciales en la actualización, encima se presenta el S II que ya viene con Gingerbread. Pero no por eso olvidamos a su hermano menor ya que el Galaxy S es un magnífico teléfono y no hay razón para renunciar a él si se consigue actualizar correctamente. En Europa así ha sido, ahora le llega el turno a los norteamericanos donde Samsung no ha terminado de entrar plenamente.
Recordemos que este terminal tiene una memoria RAM de 1 GB y un procesador a 1 GHz, y que sus capacidades de conectividad son muy buenas: HSPA con una velocidad de bajada de 21 Mbps y 5,76 de subida, Wi-Fi b, g y n, DLNA, Bluetooth 3.0, conexión de 3,5 mm para auriculares y micro USB 2.0. Lo que pasa es que la rotación de los terminales en el mercado es tan rápida que cuando sale el modelo siguiente de la gama, el anterior te parece prehistórico. Eso es lo que nos ha pasado con el Galaxy S II que aún está por llegar pero mientras tanto, disfrutemos del Galaxy S.