Nokia N9, ese smartphone con MeeGo que se encargaría de reconducir la situación en la gama alta de la compañía, finalmente no llegará al mercado. El nuevo CEO de Nokia, Stephen Elop, que tomaba los mandos de la compañía hace unos meses, tiene intención de iniciar la revolución necesaria para que la firma consiga los resultados que no acaban de llegar, actualmente con Symbian. ¿Será el inicio de la unión de Microsoft, Windows Phone 7 y Nokia?
La expansión de Android y la repercusión de Apple con su iPhone empiezan a espolear de verdad a los finlandeses, que parecen cada vez más convencidos de que la clave para conseguir el éxito definitivo en la gama alta es adoptar un sistema operativo con garantías.
Cambio de rumbo
Nokia no se ha pronunciado al respecto, pero el anuncio encubierto de la cancelación del Nokia N9 podría ser la prueba definitiva de la fusión de Windows Phone 7 en los terminales de gama alta de la finlandesa, una noticia que lleva revoloteando desde hace menos de una semana. La llegada de la plataforma de Microsoft supliría las carencias a nivel de software que no han sabido solucionar y por tanto, MeeGo, un proyecto que no acaba de arrancar, no tendría sentido en estos momentos. Además, el formato del Nokia N9 justificaría su baja, tal vez ante la imposibilidad o dificultad de adaptar Windows Phone 7 al hardware de este. No olvidemos que la propia Microsoft impone una línea a seguir en el diseño de los terminales que adquieran WP7.
El viernes, fecha clave
Elop podría proporcionar las primeras noticias oficiales sobre los cambios previstos en la Conferencia que se impartirá el viernes para mostrar los resultados financieros. De materializarse el acuerdo con Microsoft, los terminales de gama alta de Nokia adoptarían WP7, un sistema operativo que ha tenido muy buenas críticas desde su nacimiento. Éstas se han centra de inicio en la fluidez del software y su intuitivo uso, cualidad esta última que Nokia siempre ha tenido como prioridad en Symbian, por lo que la política de la empresa no sufriría una ruptura importante en cuanto a filosofía.
MeeGo, en la recámara
La cancelación del Nokia N9 no significa la muerte definitiva de MeeGo, ese sistema fruto de la unión de Moblin y Maemo. Se empieza a escuchar que este sistema basado en Linux podría tener un hueco en las futuras tabletas que Nokia estaría en disposición de presentar durante el 2011.
Está claro que Stephen Elop, el sucesor de Olli Pekka, quiere agarrar al toro por los cuernos, y parece que aun está a tiempo. Su pasado, ligado a Microsoft, puede tener el pasaporte para darle larga vida al Rey, ese que ha dominado desde hace años el mercado de la telefonía móvil. Bienvenido sea el cambio a Windows Phone 7 y el sacrificio del Nokia N9 si sirve pare devolverle la ilusión a esos millones de usuarios fieles a la firma finlandesa y de paso recuperar el tiempo perdido.