La investigación y la tecnología están íntimamente ligadas entre sí y no hay momento de descanso para ellas. Esta vez, unos investigadores de la Universidad de Manchester han creado un software de reconocimiento facial que servirá para mejorar las medidas de seguridad de los smartphone actuales. Para la prueba han utilizado un Nokia N900 y éste es el resultado.
Los smartphone se empiezan a convertir una herramienta fundamental en el día a día. Sus capacidades han aumentado considerablemente y la dependencia de estos dispositivos es bastante alta para muchos. Tanto es así que en la memoria interna de este tipo de terminales podemos llegar a alojar información realmente útil y en otros casos hasta sensible o comprometedora. Las medidas de seguridad para proteger este tipo de contenido no ha mejorado mucho desde hace años, y la llegada de las pantallas táctiles no ha hecho más que hacer estos sistemas un poco más vulnerables.
Cuando la seguridad no es una opción
Hace poco pudimos ver en la Red información acerca de las vulnerabilidades que tienen los sistemas de bloqueo de los actuales terminales. El que tenga de un teléfono Android puede que intuya de qué va todo esto. En patrón de desbloqueo que dispone Android, a pesar de la solidez que puede tener a simple vista, se ha demostrado que no es infranqueable. Con el simple rastro que deja la grasa de los dedos en la pantalla se puede llegar a descifrar el patrón utilizado. Por tanto, las pantallas táctiles pueden jugarnos una mala pasada si nuestros preciados terminales hacen acopio de información susceptible de caer en manos ajenas. El trabajo desarrollado por un equipo de investigadores de la Universidad de Manchester va camino de dejar obsoletas las medidas de seguridad actuales y hacer un poco más seguros este tipo de teléfonos.
Reconocimiento facial, el próximo paso
La potencia de la que hacen gala los actuales teléfonos inteligentes ha hecho posible que miembros de la Universidad de Manchester saquen adelante un proyecto, Mobile Biometrics, financiado por la Unión Europea. El objetivo ha sido un software de reconocimiento facial aplicado a los teléfonos móviles. La aplicación, que ha sido probada en un Nokia N900, hace uso de la cámara frontal para identificar hasta 22 puntos correspondientes a los principales rasgos faciales. Este proceso lo realiza en tiempo real y le es indiferente que la cámara esté en movimiento, ya que como podéis ver en el vídeo que os mostramos a continuación, se demuestra en varias ocasiones su efectividad haciendo giros de 90, 180 y 360 grados o enfocando y desenfocando. Esta es una primera fase donde se puede ver la utilidad del invento, por lo que quién sabe las posibilidades que tendrá en los smartphone este tipo de medidas de seguridad ya vistas en PC.